Comunicar desde el corazón, una herramienta invencible

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comunicar desde el corazón

Lo que se comunica desde el corazón tiene otro valor. En el mundo de la sospecha, en el que todo discurso es sometido al escrutinio del interés oculto, me atrevo a decir que solo al comunicar desde el corazón se puede conseguir una comunicación efectiva. Las empresas saben que deben conseguir encajar las tres piezas, las tres capas de un pastel consistente: lo que son, lo que dicen que son, lo que otros dicen que son. La coherencia y la consistencia son las dos leyes físicas de la reputación. Empresas de una pieza. Hombres y mujeres de una pieza. ¿Puedes sostener una comunicación desde el corazón de tu empresa o de tu ser persona?

Os hemos traído este podcast que grabamos la semana pasada con Borja Milans del Bosch. Borja trabaja hoy como entrenador de equipos y de personas. Vamos a llamarle formador. Sus sesiones tienen dinámica: plantea preguntas, fija objetivos, y propone ejercicios en los que las personas se tienen que implicar. No se trata de asistir de forma pasiva a una clase teórica con ejemplos, videos, presentaciones. Es algo más. En el podcast lo explica. Se trata de despojarse de eso ego que todos creamos para movernos por el mundo, para que nos respeten, nos consideren, y tengan en cuenta quiénes somos. Es una máscara que suele ser útil, también necesaria, pero se acaba convirtiendo en un estorbo.

Desde hace unos años, en Ludiana nos dedicamos, entre otros trabajos, a formar a directivos en las habilidades de la comunicación. Les enseñamos en sesiones prácticas. Buscamos que se sientan de verdad en un escenario en el que te la juegas, con periodistas que buscan una noticia, un titular, mientras tú lo que pretendes es que transmitan tu mensaje. También les ofrecemos las claves para hacer un buen discurso, para motivar, para persuadir a sus equipos, a sus audiencias. Y una de esas claves, es la de hablar, comunicar desde el corazón. La verdad de la experiencia propia, de los sentimientos profundos que escondemos bajo la máscara, tiene un valor de oro en la comunicación.

No es fácil exhibirla, porque la condición para hacerlo es mostrarse vulnerables, y ¿quién quiere aparecer como vulnerable? A priori nadie. Y sin embargo es una condición fundamental para obtener credibilidad y para captar la atención de los públicos. Los superhombres, las superwomen no tienen público. Toda historia de éxito está construida con renuncias, sufrimientos, fracasos, equivocaciones, errores, e incluso víctimas. La disculpa, el perdón, la indulgencia, consigo mismo y con los demás, el reconocimiento de la vulnerabilidad y de las debilidades, son los terrenos en los que se gana la complicidad, en los que se construye la persuasión.

Recuerda aquella historia del niño que escribió a Boeing una carta en la que incluía el dibujo de un avión que había imaginado. La compañía le respondió con una misiva muy seria: no aceptamos ideas que no hayamos encargado. El padre del pequeño, publicista, difundió la respuesta a los cuatro vientos. Boeing no tardó un día en responder a través de las redes: somos buenos haciendo aviones, pero todavía tenemos mucho que mejorar en nuestras relaciones sociales. Invitaron al niño a ver la planta de fabricación.

El podcast de Borja Milans del Bosch nos enseña muchas cosas y nos muestra un camino de verdad. En Ludiana estamos trabajando para crear un formato especial: una sesión de aprendizaje de técnicas de comunicación que comience por lo básico y fundamental: escuchar el corazón de cada uno, el de las personas y el de las organizaciones, para que la comunicación, tu comunicación, sea un arma humanista, y por tanto invencible.

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